AÑO DEL AMOR
Sobre la primera
lectura del año: Núm 6,22-27
Un año nos ha
nacido
de los secretos
divinos.
Lo que trae en
sus alforjas
nadie hay que lo
haya visto:
no hay profeta
en Israel
que sepa para
decirlo,
ni en Moab
tampoco había
otro Balaam
adivino.
Se llamará creación
de sus dedos y
sus mimos,
obra nueva de
sus manos
que otro igual
no había sido.
Un año nos ha
nacido,
se escucha el
primer vagido;
es un bebé
virginal
en María concebido.
* * *
No está escrito
en las estrellas
– quiero otra
vez repetirlo –
lo que este año
ha de ser
Año Nuevo, Buen
Camino,
Año hasta hoy
increado
en los divinos
designios.
¿Será muerte, será
vida…
entre mis seres
queridos…?
¿Será el año del
encuentro
con el Dios de mi
destino?
¿Vivirán o
viviremos
los que juntos
hoy vivimos?
Yo soy filósofo
mudo
de esencias
que no domino.
Un año nos ha
nacido,
temblando tan
pequeñito.
* * *
Más he aquí que
yo oía
con estos oídos
míos
las palabras de
un oráculo
del otro lado
venido,
Palabras para mi
carne,
ternura de fuego
vivo,
palabras que si
se escuchan
nunca caen en
olvido,
Era mi Dios
quien me hablaba
por labios de sus
ministros,
palabras de
Eucaristía,
traídas del
Santo Libro,
primicias de la
Escritura
en un año bien
nacido,
y yo sentía el
milagro
que era un toque
del Espíritu.
* * *
Sonaba su propio
Nombre:
Dios te bendiga,
hijo mío.
Tres veces me lo
decía:
yo lloraba
agradecido,
“Y yo los
bendeciré”:
lo digo y hago y
afirmo.
Mi corazón se
llenaba
con ese don
creativo,
y dije en mi
santo gozo:
Yo lo creo y lo
he sentido:
Será el año de
mi amor
este Año
bendecido,
¡Oh Padre, yo me
abandono,
en tus brazos,
remecido!
Un año nos ha
nacido:
¡gracias, mi Padre
bendito!
Guadalajara,
Jal., Año Nuevo 2014.
1 comentarios:
Un bello poema, fray Rufino, tomo todos los que proceden de su pluma.
Juan José.
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